21/8/10

GEOPUNTURA CON CANTOS RODADOS


Cada vez es mayor el número de personas que está tomando conciencia de la necesidad de un profundo cambio en sus relaciones con el entorno. La situación por la que atraviesa la Madre Tierra evidencia que nos aguarda un oscuro porvenir si no somos capaces de alcanzar una forma de pensar y vivir más acorde con nuestra verdadera naturaleza humana.

La comunidad de Amalurra (Arcentales, Bizkaia) lleva más de una década tratando de hacer realidad esa nueva
forma de pensar y vivir en el que el despertar de lo femenino es el ingrediente clave para la recuperación del ser humano y en consecuencia también del Planeta vivo que le acoge, una nueva forma de pensar que exige el establecer puentes entre la razón y el corazón, primando el sentir y el intuir para hacernos más receptivos a los mensajes que nos llegan desde todos los ámbitos de la realidad. En este sentido Amalurra es el lugar idóneo para una práctica como la Geopuntura, la cual exige interactuar con la Madre Tierra


La idea de Geopuntura nos obliga a realizar un largo viaje en el tiempo para situarnos en el corazón mismo de la Cultura Megalítica que emergió simultánea y misteriosamente en los lugares más lejanos e insospechados del Planeta. Dólmenes Cromlech y Menhires, son las más conocidas formaciones pétre
as erigidas con un objetivo que aún sigue siendo un misterio a pesar de que la Geobiología nos proporciona algunas herramientas con las que, al menos, podemos desentrañar algunos aspectos parciales. En mi opinión estos antiguos monumentos respondían a las necesidades del ser humano de aquel momento concreto aunque, posiblemente, su actividad va mucho mas allá en el tiempo, sin descartar que guardan un preciado mensaje para el ser humano contemporáneo. En el momento presente nuestro estadio evolutivo es otro, esto no se puede perder de vista. Por otra parte no debemos olvidar que aquellos seres humanos no buscaban la explicación de los fenómenos naturales, su forma de interpretar el mundo se basaba en el sentimiento tal y como corresponde a la visión organicista de la realidad propia de la humanidad hasta el Renacimiento

La Geopuntura, pues, hace referencia a piedras insertadas en determinados puntos energéticos, generalmente de signo negativo, a fin de reequilibrar espacios alterados mediante la desviación del exceso energético hacia el cielo o bien trasmutando energías polares. Estas podrían ser algu
nas de las funciones del Menhir antiguo, por ello cada menhir fue colocado en el punto preciso requerido y a plena conciencia.

Con seguridad, como ya lo hemos dejado entrever anteriormente, las necesidades de la Madre Tierra y del ser humano actual, exigen otro enfoque. En la utilización de técnicas de Geopuntura salvo excepciones, no se trataría de desviar ninguna energía por inadecuada que esta fuere y mucho menos de neutralizarla, si es que esto se pudiera hacer (cosa bastante improbable). Se intentaría realizar la síntesis entre el exceso de yin degenerativo de la Madre Tierra y el exceso de yang inflamatorio del Padre Cosmos. Una de las posibles maneras, adecuadas para conseguir este objetivo, exigiría estos requisitos:

1.- Actuar en los lugares precisos desde la conciencia empatizando con la Madre Tierra
2.- Utilización de cantos rodados orientados.

La experiencia aconseja máxima prudencia en este tipo de actuaciones, no suceda que desestabilicemos aun más el espacio que pretendemos armonizar, por lo tanto cualquier trabajo de estas características necesita un seguimiento detallado posterior


UNA CUESTION PREVIA

Reconozco que es difícil demostrar muchas de las cosas que comento en este artículo, no es eso lo que pretendo y es que en estos momentos, en el campo de la Geobiología he optado por un empirismo practico sin renunciar a las aplicaciones de instrumental técnico y a las mediciones y a los controles que fueren necesarios; cuando interactuamos con la Madre Tierra tomamos contacto con otras esferas de la realidad en las que las referencias no son a lo mejor todo lo estables que nuestra mente racional demanda. Esto lo constatamos continuamente en la practica Geobiológica cotidiana.

Una sencilla reflexión. ¿Cuál es la naturaleza de las geopatías? ¿Cómo interaccionan con cada individuo? En algunas ocasiones la incidencia de las geopatías en la salud proviene de una fuente física reconocible y mensurable, un campo electromagnético, un cruce telúrico virulento, una fisura o una corriente de agua, por ejemplo. En otras ocasiones la naturaleza de las mismas es mucho más compleja. Sabemos que detrás de estas “anomalías” se esconden una mayor radiación gamma e infrarroja o una mayor ionización positiva etc. pero nada conocemos de la información que vehiculan esas “anomalías” ni de cómo interactúan con cada individuo en particular y en estas ocasiones la respuesta meramente mecánica se queda un tanto corta, se debe actuar desde otro estado de conciencia que involucre al sentir. Este es el punto de partida desde el que se trabajó en Amalurra.


ESTUDIO GEOBIOLOGICO DEL LUGAR

Se realizó el estudio en una zona de Amalurra en la que se aprecian bastantes alteraciones geobiológicas, alguna de ellas atraviesa una zona del hotel allí ubicado afectando a varias habitaciones.
Aproximadamente a unos 60 metros al Sur del hotel se hacía evidente un punto de fuerte alteración de
unos 50cm. de diámetro. Este punto es atravesado por una corriente de agua en sentido Este-Oeste y una falla húmeda de unos 40 cm. de anchura que desde el Suroeste atraviesa el hotel. A estos dos factores hay que añadir que sobre el citado punto se detecta un cruce Hartmman y una banda Curry. Observamos la presencia de toperas y hormigueros a lo largo de la fisura. El biómetro indica un máximo de 1500 unidades.
Encontram
os otra corriente de agua paralela a la fachada del hotel. Por otra parte en la parte posterior y a una distancia equidistante del punto conflictivo situado al Sur del hotel el biómetro vuelva a marcar mínimos, localizamos una nueva corriente superpuesta a una fisura que viene a encontrarse con la ya anteriormente citada antes mencionada. Aquí también encontramos gran cantidad de toperas y árboles que crecen desviados de la vertical
En el interior del hotel observamos una fuerte alteración que abarca unos 5 metros a cada lado de la fisura. El biómetro oscila entre 3500 y 4000 unidades.
El lugar nos indica que la Geopuntura es una buena opción. Optamos por utilizar una piedra-menhir, canto rodado y caolín. El objetivo es armonizar en la medida de lo posible la franja de 10 metros que afecta a las habitaciones del hotel.

LAS PIEDRAS UNAS BUENAS Y EFICACES AMIGAS

Siempre he
pensado que si nuestros antepasados daban tanta importancia a las piedras y a su capacidad de “recordar” es que tenían sobradas razones para ello, a pesar de que nosotros no lo podamos comprender con nuestra mente racional. Si los pueblos que aún no han roto los lazos de unión con la Madre siguen dando importancia a las mismas tiene que haber un motivo serio que va más allá de una mera superstición. El componente de cuarzo (sílice) presente en toda piedra nos conecta con el núcleo de la Madre y es un elemento esencial para la vida. Pero, además, la estructura del cuarzo es idéntica a la del agua. En un artículo anterior (Los Lugares Sagrados. Agua, Piedra y Conciencia) recordaba las afirmaciones de Alberto Borrás “La constante carga y descarga de electrones de los vértices de esos millones de tetraedros que forman el cristal de cuarzo producen diminutas curvaturas espacio-temporales, es decir puertas dimensionales que canalizan fuerzas a nuestro mundo tridimensional”. De la Memoria del Agua se ha escrito ya mucho sin embargo convendría recordar las experiencias realizadas por Masaru Emoto. ¿Y la piedra? No dudo que tenga esa misma capacidad de captar información e irradiarla.

¿Qué tienen de especial los cantos rodados? Evidentemente no podría dar una respuesta convincente, sin embargo establecer analogías simbólicas entre el ser humano, su mundo anímico y los elementos de la Naturaleza puede ayudar a una mayor comprensión global de algunos fenómenos
. Al ser humano “sin aristas” lo asociamos con características como flexibilidad, fluidez, paciencia, receptividad, adaptación, equilibrio etc. Estas características no se incorporan al equipamiento psicológico humano de forma automática, por lo general son la resultante de un largo proceso de años en los que la propia dinámica de la vida provoca el “pulido de aristas” configurando los rasgos de la personalidad ya citados. El canto rodado “ha sufrido” también un largo proceso de milenios en los que a través de la acción constante de los cuatro elementos de la Naturaleza ha ido adquiriendo su configuración actual. Las formas redondeadas sintonizan mejor con los procesos biológicos y seguramente van a resonar con la actitud y la conciencia dirigida. Así pues actuar humildemente de manera consciente y empática es la única manera efectiva de interactuar con la Madre Tierra y por supuesto con una de sus criaturas más desconocidas y despreciadas, la piedra, elemento esencial en el tipo de geopuntura al que nos estamos refiriendo.


EL PROCED
IMIENTO

Bien, Con la actitud más arriba descrita se procedió a realizar una primera excavación en el punto de máxima alteración: un metro de profundidad y un metro de diámetro. Allí se ubicarían la piedra-menhir, los cantos rodados y el caolín.
Una vez introducida la Piedra-menhir (tres metros de altura y 1.500kg de peso) y alcanzada la vertical, se colocó en la orientación precisa que la piedra demandaba, para ello se fue girando muy lentamente hasta dejarla en la posición señalada por radiestesia. A continuación se fueron introduciendo las primeras capas de tierra sobre las que se fueron colocando uno a uno los cantos rodados creando un círculo alrededor de la piedra-menhir. También en este caso se fueron ajustando la posición de los cantos rodados con la ayuda de la radiestesia, se añadió polvo de caolín como dinamizante y se terminó el relleno de la excavación.

La Geopuntura con cantos rodados se puede realizar sin el recurso de la piedra-mehir. Es suficiente con realizar en el lugar preciso una pequeña excavación de aproximadamente 60cm. de radio y unos 20cm. de profundidad colocando a continuación los cantos rodados respetando escrupulosamente la orientación que cada canto demande. El número de piedras y la altura que deben de alcanzar habrán de testarse, normalmente es suficiente con una altura de 50cm.

¿Es importan
te la orientación de las piedras en el quehacer geobiológico? Anteriormente me he referido a la analogía como sistema de ayuda interesante para una comprensión más global de determinados fenómenos. La Naturaleza no deja absolutamente nada al azar. Cada elemento natural, animado o inanimado contribuye a que la melodía de la creación resuene sin asonancias y la orientación es un factor que contribuye a ello. Cada piedra posee su propia orientación espacial desde la cual cumple mejor con su función de acoplamiento al entorno y por añadidura su emisión de forma contribuye a la estabilización del lugar. Esto lo saben perfectamente los pueblos a los que desde nuestra ignorancia o soberbia llamamos primitivos. También lo sabían los Maestros canteros que erigían las catedrales. No es bueno que los seres humanos pierdan el norte, las piedras también tienen también el suyo propio.



MEDICIONES REALIZADAS

1.- Alrededor de la piedra-menhir se perciben tres círculos concéntricos energéticos que asociamos a un apelotonamiento de bandas Hartmann, el primero a un radio de 2 metros, el segundo a 8 m
etros aproximadamente y el tercero a 12 metros.

2.- La influencia perceptible de la piedra-menhir abarca un radio de 21 metros

3.- De la piedra-menhir surgen dos bandas rectilíneas de 30cm. de anchura y longitud desconocida. La primera la encontramos a 45 grados y la segunda 300 grados. Desconocemos su naturaleza, podrían asemejarse a las líneas leys descubiertas por el investigador Alfred Watkins. Llama la atención que a lo largo de esas bandas rectilíneas, en cualquier punto de ellas si se introduce una piedra o un puntal de madera o hierro se reproducen los efectos de la piedra-menhir pero a escala más reducida. De laguna manera recrea estructuras fractales.

4.- La piedra-menhir resuena con los cuatro centros energéticos inferiores aunque parece tener una incidencia especial en el centro del Plexo Solar a 1,30cm. del suelo aproximadamente y entre los 45 y 65 grados.

5.- La fisura y zonas de influencia aledañas que afectaba a algunas de las habitaciones del hotel parecen haber recuperado la armonía.


SINCRONIAs EN TORNO AL OSO

Hace algunos meses el chaman Daan Van Kampenhout impartió en Amalurra un curso de Constelaciones Familiares. La problemática que vive el Pueblo Vasco estuvo muy presente a lo largo del fin de semana que duró el curso. Daan señaló que parte del problema del País tiene que ver con el hecho de que se ha perdido lo que él denomina el “Espíritu del Oso” o dicho de otra manera, hemos perdido la conexión con la Madre Tierra. Este es precisamente el significado de la palabra Amalurra. El chaman veía que era tarea urgente activar esa conexión. Pues bien, para nuestra sorpresa en la piedra-menhir se aprecia la silueta de un oso abrazando lo que podría ser un árbol, una estanpa que recuerda al oso y el madroño madrileño. También es significativo que la piedra a la que tantas veces hemos hecho referencia fuera trasladada a Amalurra desde el Monte Urkiola en cuyas faldas fue abatido el último oso libre que habitó estas tierras. Bonitas y misteriosas sincronías que cerrando un círculo sugieren la apertura de un camino de esperanza y de reconciliación con la Madre a través de nuestra propia reconciliación interior.