2/5/15

UN CAMBIO DE RUMBO ACELERADO



Queridos amigos.  Después de un tiempo tal vez  demasiado prolongado,  vuelvo a   mi cita periódica con el Blog, respondo a su llamada, así de simple.
 Corren tiempos difíciles , es verdad que siempre lo han sido, pero las circunstancias presentes dibujan un panorama  bastante sombrío si no lo encaramos con inteligencia y corazón o con la inteligencia del corazón.
El ser humano está siendo vapuleado en toda su integridad, desde frentes externos  y así mismo  desde frentes que se hallan solapados en su propio interior.  Se han abierto todas las compuertas,  no hay diques que frenen la agresión. El objetivo no es otro que convertirlo en esclavo, sino físico, que también, en esclavo espiritual de fuerzas que son ajenas a su verdadero ser.
Minorías corruptas propulsoras de la explotación humana más rancia e insolidaria, utilizando a su servicio  la mayoría de  los medios de comunicación,  el control y manipulación científica, la persuasión consumista y la explotación salvaje de la Madre Tierra, son solo algunos ejemplos de por dónde van las cosas.
La inseguridad,  la superstición, la duda, la ira y el miedo, un profundo miedo se han  adueñado, momentáneamente del alma humana, cumpliéndose así uno de los objetivos de los dueños del mundo. Sin embargo, hay luz, mucha luz al final del túnel.
Estamos viviendo un tiempo de transición quizá  decisivo para el futuro de la humanidad. Ello está exigiendo que de una vez por todas, tomemos  las riendas de nuestra vida, sin delegar nuestra responsabilidad en manos ajenas.
Que nadie dude que desde el mundo espiritual están llegando energías  muy especiales que van a permitir la eclosión de nuestro propio ser interno. Es un hecho constatable que cada vez más personas  estén tratando de encontrar un camino espiritual  que dé respuesta a los eternos interrogantes  y a los que el momento actual plantea. Ahora bien, estas energías precisan del despertar de nuestro dormido Grial interior.
 Arduo trabajo el que se nos presenta, sin atajos posibles, pero prometedor. El Grial interno insta a tomar conciencia  agradecida y amorosa de nuestra propia sombra, inmejorable  aliado de crecimiento,  solicita  ver a nuestro hermano como espejo de lo que realmente somos, nos invita a tener   presencia firme, la cabeza en el Cielo y los pies en la Tierra, cuando el amargo aliento de la injusticia y la violencia se vierta sobre nosotros o sobre cualquier ser humano, suplica volver a mirar la Madre Tierra y sus criaturas, todas, con delicadeza y ternura.
Es tiempo de trasmutar no de destruir,  es tiempo de poner en práctica la empatía con, no la lucha contra, es tiempo de observar con serenidad y sin prejuicios desde el vacío, es tiempo de escuchar activamente lo que el entorno  dice y lo que mi interior sugiere. Es tiempo de unir pensamiento y corazón. Esta es la clave para transitar un momento apasionante y acelerado donde todo verá la luz y donde la presencia del mundo espiritual nos acompañará allá donde estemos.